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Si te han diagnosticado de Trigonitis y quieres mejorar tu calidad de vida, este blog te será de gran ayuda.

EXPERIENCIA PERSONAL CON TRIGONITIS

En mi opinión, una de las peores cosas que tiene la Trigonitis, es la desesperanza que infunda, ya que es una enfermedad que no tiene tratamiento eficaz, o por lo menos no hasta el momento. Yo la padezco practicamente desde mi primera menstruación, y después de 17 años le he puesto nombre a esas molestias tan desagradables que siento cada día. Empezé sintiendo una especie de quemazón en toda la zona genital, y muchas molestias cuando orinaba, antes de orinar y despues de orinar. Es muy difícil describir porque es entre dolor, escozor, quemazón, incomodidad, pero es constante, tienes momentos del día o incluso días enteros que estas mejor pero sabes que es algo que esta ahí y que no se ha ido. Y sabes que si vas a orinar te dolerá y despues de miccionar más aún. Es complicado descubrir cual es el origen. En un principio pensé que era algo ginecológico pero todas las pruebas estaban bien. Decidí ir al urólogo, porque a parte de los síntomas propios de la Trigonitis, tuve una temporada en la que tuve cuatro cistitis de repetición. He pasado desde entonces por distintas pruebas hasta que el diagnóstico fuera inflamación del trígono. Las más importantes han sido  una "urografía", que se trata de una radiografía con contraste. Te observan como el líquido del contraste va pasando por tus riñones, vegija, uretra, ureter...,  una "ecografía" de la vejiga y una "cistoscopia", ésta última es la más dolorosa. Es un procedimiento que utiliza un sistema óptico para poder ver en el interior de la vejiga urinaria. El cistoscopio consiste en un tubo con una cámara, conectado a un vídeo, que permite ir viendo el interior de la uretra y de la vejiga de la orina.
En la cistoscopia se vió que el trígono lo tenía muy vascularizado e inflamado, es decir Trigonitis.
Por fín me habían dado un diagnóstico de algo que me pasaba durante años, fué un paso importante. El tratamiento que me recetaron fué un antibiótico "Septrim forte" durante seis meses, una al día y un antiinflamatorio, "Tebetane" tres veces al día, también durante seis meses. Al principio sentí mejoría pero pasaron los seis meses y los síntomas continuaban igual.
Hoy en día sigo con las molestias como el primer día pero si que os puedo decir los medicamentos que he pobrado y que con ellos he sobrellevado mejor los síntomas, aunque eso sí, de forma momentánea. Es decir, a modo de calmante en un momento determinado pero no como cura. Algunos de ellos son "Ditropan", "Buscapina", "Buscapina compositum" y "Fenazopiridina".
Como empezaba diciendo en ésta página, lo peor es la desesperación que sientes al sentir que esta enfermedad va a ser para toda la vida, no parece haber nada eficaz para su curación.
Según lo que he leído siguen investigando en ello asique tendremos fé en que algún día podamos estar libres de esas molestias tan incómodas, desagradables y dolorosas que nos produce la Trigonitis.